Diario Cataluña 5: Poble Espanyol, Tibidado y Búnker del Carmel
Comienza mi último día en Barcelona. He disfrutado en estos días del espectáculo de las fuentes mágicas de Montjüic, he descubierto 2 ciudades tan hermosas como Girona y Tarragona y además me he sumergido en la mágica y misteriosa Montaña de Montserrat. Hoy tocaba comenzar con una visita que no había realizado anteriormente en la ciudad condal: Poble Espanyol de Barcelona.
Poble Espanyol de Barcelona
Después de una caminata interminable que se me hizo un poco pesada llegué finalmente al recinto. Tengo que decir antes de detallar un poco lo que me encontré que el precio es un poco excesivo para lo que vais a ver.
Recorro las calles del recinto siguiendo un mapa que me dan con la entrada, disfrutando de sus 117 edificios a escala real que representa distintos elementos de la arquitectura española de gran belleza. El punto negativo es cuando ves la cantidad de negocios que existen en la planta baja de dichas recreaciones, con lo cual la visita no es «cultural» como esperaba.
Las edificaciones del Poble Espanyol de Barcelona están organizadas por zonas de España, y hay que reconocer que «tiendas» aparte, hay construcciones muy bonitas como el Monestir Romànic de Sant Miquel, la Calle Arcos o la Torre D’Utebo.
- Precio entrada regular: 11,70€.
- Lunes. 09h – 20h.
- Martes, miércoles, jueves y domingos. 09h – 24h.
- Viernes. 09h – 03h.
- Sábados. 09h – 04h.
- 24 de diciembre. 09h – 20h y 24h – 6h.
- 25 de diciembre. 09h – 14h.
- 1 de enero. 13h – 24h.
- Del 9 de enero al 6 de febrero. De lunes a jueves. Se cierra a las 20h.
Primero me llevan a descubrir el Port Fòrum, un puerto deportivo en una zona que está creciendo con el tiempo, repleta de locales, centro comerciales y zonas deportivas. Además, me indicaron que en esta parte de Barcelona, en el Parque del Fòrum, la Feria de Abril de Cataluña, en la cual todas las casetas son abiertas al público en comparación con las de Sevilla.
Comienza a llover (por no decir que cae el puto diluvio universal), últimamente el agua me sigue la pista en todos mis viajes. Tras comer nos montamos en el coche de mis amigos y nos dirigimos a uno de los mejores miradores de Barcelona, el Tibidabo, con sus 512 metros de altura. La pena es que la lluvia no permite disfrutar de la panorámica de la ciudad.
A pesar del mal tiempo no nos damos por vencidos, y visitamos el mejor mirador de la ciudad condal, el Búnker del Carmel localizado en la parte alta del Turó de la Rovira. Desde aquí se consigue una panorámica de 360 grados.
A la lluvia que ha intensificado su potencia se le une la niebla (que buena suerte estoy teniendo) con lo cual la visibilidad es prácticamente nula.
6:29 am
No conocía el Poble Espanyol, es como un recinto/Museo, no??? Tiene buena pinta aunque me imagino que demasiado turistizado por lo que comentas de las tiendas. Pero aún así, curioso.
7:33 am
Buenos días.
Es una especie de parque, por llamarlo de alguna forma. Entras, hay multitud de calles con edificios famosos de determinadas ciudades, incluso una calle famosa (la calle Arcos), y una gran plaza.
Positivo: la belleza de las edificaciones a escala. Negativo: que ver tiendas en los bajos de esas edificaciones no mola y el precio de entrada es algo elevado.
Saludos amigo viajero.